Algunas personas creen que quienes se dedican al modelaje tienen una mayor incidencia de trastornos alimenticios — afortunadamente no hay evidencia de esto, y la escasa investigación al respecto no ha encontrado nada que justifique una sospecha en ese sentido:
Un escaso número de estudios realizados en modelos de moda y los trastornos alimentarios resultaron, entre 1980 y 2015, con siete artículos incluidos en esta revisión. En general, los resultados de estos estudios no indican una mayor prevalencia de trastornos de la alimentación entre los modelos de moda en comparación con los no-modelos. Los modelos de moda tienen una imagen corporal positiva y generalmente no reportan comportamientos alimentarios más disfuncionales que los controles. Sin embargo, los modelos de moda están en promedio ligeramente bajos peso con un IMC significativamente menor que los controles, y le dan mayor importancia a la apariencia y la forma del cuerpo delgada, y por lo tanto tienen una mayor prevalencia de síndromes parciales de trastornos alimenticios que los controles.
Y lo que se puede afirmar sin evidencia se puede descartar sin evidencia. Esta es una buena noticia para todos —al menos todos los que no buscamos prohibir el modelaje a como dé lugar—.
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Publicado en De Avanzada por David Osorio
