Está más que demostrado que únicamente un piadoso creyente puede insultar, denigrar y humillar sin ninguna responsabilidad a millones de personas por el mero hecho de que no comulguen con sus prehistóricas y dementes creencias.
Vivimos en un mundo en el que si una persona ultraja, oprime o injuria al resto de los ciudadanos más pronto que tarde acaba inmerso dentro del sistema judicial y termina de una forma u otra haciéndose responsable de sus ofensas. Salvo, por supuesto, si el ofensor es un piadoso creyente, puesto que en ese vergonzoso caso no sólo no es castigado penalmente sino que se solicita el máximo respeto para tan criminal individuo.
Y los últimos ejemplos nos vienen (como no podía ser de otra manera) de los siempre piadosos EEUU, tierra de los más ignorantemente catetos cristianos de todo el mundo civilizado. Allí un par de telepredicadores, de esos que exhiben sin pudor ni vergüenza alguna el infamante hecho de no haber leído más que los delirios de unos pobres deficientes mentales pastores de cabras del desierto se han felicitado porque otro criminal, esta vez seguidor del barbudo pederasta (misterios insondables del delirio religioso porque parece que sus distintos dioses los crían pero luego ellos se juntan en su ofensiva religiosidad) haya asesinado a decenas de homosexuales únicamente por el mero hecho de vivir su vida el libertad.
Uno de los más que estúpidos fanáticos cristianos ha declarado ante el terrible asesinato de Orlando que
"No se debe estar de luto por la muerte de 50 sodomitas. La gente dice, bueno, ¿no estás triste por la muerte de 50 sodomitas? Aquí está el problema. Es como el equivalente de preguntarme - y si usted me pregunta, oye, ¿estás triste porque 50 pedófilos murieron hoy? Um, no, yo creo que es genial. Creo que eso ayuda a la sociedad. Usted sabe, creo que Orlando, Florida, es un poco más seguro esta noche."
Y por supuesto este repugnante demente debe ser escuchado, respetado y hasta financiado por la sociedad porque es un ejemplo de la siempre asquerosa "moralidad" cristiana.
Y el otro teleevangelista estadounidense ha rizado el rizo de la más provocadora demencia al declarar que
"La buena noticia es que al menos 50 de esos pedófilos no van a volver a hacer daño a ningún niño más. La mala noticia es que muchos de los homosexuales del bar están todavía vivos, así que continuarán molestando a los niños y seguirán reclutando a gente para llevar su sucio estilo de vida homosexual."
Cuando si hay una verdad casi científica a la altura de la Ley de la Gravitación Universal es que si en este mundo hay nauseabundos pedófilos siempre suelen devotos cristianos, sobre todo cuanto más alto ascienden en la jerarquía de las diversas demencias cristianas.
P.D.
Y mientras tanto en España, día sí y día también nos viene un zafio y cavernicola miembro del clero que nos adoctrina con eso del "Imperio Gay".