¿Se imaginan confiar en alguien, que además es amigo, compañero, etc., y que en un momento dado nos pongamos enfermos y esta persona de confianza piense que nos ayuda a curarnos cuando realmente no es así?
Pues añadan la indefensión que produce no poder comunicarse al pertenecer a otra especie animal. Y no disponer de otra opción que la que nos ofrecen. Y tener una vida de por si no muy fácil.
Así podría ser lo que le sucede a aquellos animales, muchos de ellos mascotas, que reciben para sus enfermedades tratamientos pseudocientíficos y basados en creencias de sus cuidadores.
¿Placebo para curar animales?
Lo dijo hace unos meses el premio Nobel de Química en 1987 Jean-Marie Lehn sobre la homeopatía: “Basura. Sin molécula no hay efecto posible.”. Esta pseudociencia basada en “lo similar que cura lo similar” y “a mayor dilución mayor efecto”, pero cuyos únicos fundamentos son creencias ciegas y justificaciones inventadas “ad hoc”, es utilizada para usos veterinarios (que realmente no lo son, ya que no cuentan con aval científico de eficacia) 
Utilizar homeopatía como único tratamiento es una condena para un animal indefenso. Defenderla y difundirla no tiene justificación ni apoyo racional, ni evidencias que lo sustenten.
Maltratar con agujas
¿Se imaginan que alguien comienza a clavarles agujas de forma aleatoria?¿Y no poder decir que hacen daño? 
El colmo por tanto es aplicarlo en un animal. Y se hace. Y se cobra, cómo no, aunque contravenga la ética más básica de la medicina para animales.
Fracturas en animales
Y las “energías vitales”…
Si, también hay quien gana dinero argumentando que existe una energía vital en nuestras mascotas, y que su desequilibrio provoca su enfermedad. ¿Qué dirán entonces cuando les llegue un caso de Leishmaniosis? Ellos venden que son capaces de restablecer ese inexistente equilibrio energético. Y si, hay “Feng Shui” para mascotas. Poco más que añadir a este engaño.
Llegado a este punto pensarán que chifladuras como la de que el agua salada inyectada es saludable no se usan en veterinaria. Por desgracia se equivocan. Y DSalud no podía faltar a esta cita. Y no es el único defensor.
Pero, ¿por qué esta crueldad en seres indefensos?
Más allá del posible beneficio económico para unos, las creencias ciegas en métodos absurdos llevan a unos a aplicarlos, y a otros a perjudicar a sus animales. Evidentemente influye que siempre se quiere lo mejor para alquien querido… pero eso muchas veces nos nubla la vista. Y esos egos que muchos quieren inflar…
Al final, como tantas veces, quien sufre el daño no puede rebelarse ante estas situaciones injustas.
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Fuente
¿Qué Mal Puede Hacer? blog / twitter.com
Blog de quemalpuedehacer.es, con casos reales de perjuicios ocasionados por pseudociencias, mancias o similares
